Catalin Dragomir (Rumanía) :
Actualmente, no existen incentivos específicos para los agricultores. Además, el mercado de créditos de carbono es incipiente. Y el sistema de producción es más bien extensivo o de bajos insumos, la eficiencia no siempre es el objetivo principal de los ganaderos. Sin embargo, la nueva generación de agricultores está más abierta a ajustar la gestión de las explotaciones, con el fin de lograr una mayor eficiencia, aplicar nuevos conocimientos, modernizar las explotaciones, etc. En este contexto, destacamos que muchas medidas de mitigación del carbono conducen también a una mayor eficiencia de diversas actividades agrícolas.
Sindy Throude (Francia)
Desde el punto de vista “francés”, el hecho de que el tema del medio ambiente esté ligado a factores técnicos y económicos es el 1er argumento, válido en todos los países y no sólo en Francia. En efecto, al mejorar los resultados técnicos (optimización de los insumos, mejora de la gestión de los rebaños, mejor aprovechamiento de los forrajes…), se mejoran los resultados económicos y también los medioambientales. Normalmente, es en la misma línea, como se desprende de los primeros planes de acción elaborados en las explotaciones innovadoras francesas: la mitigación de los gases de efecto invernadero (por término medio -11%)casi siempre va acompañada de un beneficio económico (una media de +19 euros/oveja).
Gabriella Serra (Italia)
Los argumentos que más llaman la atención de los ganaderos, a la hora de corregir el estado de sus explotaciones en términos de impacto medioambiental, son los relacionados con el nivel de producción y/o los consumos energéticos. Obviamente, todos estos elementos deben traducirse después en una relación con los aspectos económicos de la explotación.
Roberto Ruiz (España)
Probablemente el único argumento eficaz es la relación positiva existente entre la mejora de los indicadores técnicos con la rentabilidad y el impacto medioambiental (es decir, mayor eficiencia, menores costes y menor huella de carbono). También las expectativas para la futura implantación de mercados de carbono, que pueden traer consigo al menos el pago por la fijación de carbono, y que debiera hacerse extensiva a otros servicios ecosistémicos. Es difícil que los productores asuman la responsabilidad de su actividad, que sólo es parcialmente responsable del cambio climático, sobre todo cuando hablamos de un sector poco reconocido por el resto de la sociedad, habitualmente poco rentable desde el punto de vista económico y en claro declive por falta de relevo generacional. También hay que tener en cuenta que los sistemas ovinos realizan un bajo consumo de combustibles fósiles, mantienen el medio rural y la población gracias a la actividad, evita riesgos de incendio y fija el carbono.
Cathal Buckley (Irlanda)
El sector ovino irlandés está fuertemente orientado a la exportación y en 2022 lo hizo a más de 35 países por valor de unos 476 millones de euros. Desde una perspectiva de consumidor, marketing y competencia en los mercados de exportación, hay una significativa presión sobre los procesadores de carne para producir con una huella de carbono lo más baja posible.. Desde una perspectiva interna de Irlanda hay una significativa presión para reducir la emisión absoluta de emisiones para lograr el objetivo sectorial establecido para la agricultura. Existe también beneficios económicos potenciales a nivel de granja al producir de forma más eficiente respetuosa con el medio ambiente o mayor producción con un determinado nivel de insumos. Recientes reformas de la Política Agrícola Común han incluido incentivos para agricultores para que adopten prácticas que mejoren la eficiencia del carbono.. Hay subvenciones que se han canalizado sobre la base de los pilares 1 y 2, comosonlos eco-esquemas.